Honduras, 17 de noviembre de 2025 — En tan solo nueve años, Luis Alfonso Maldonado Deras ha visto cómo su negocio pasó de vender 50 o 100 cajas a 1,200 cajas por semana de productos frescos como zanahoria, cebollino, remolacha, papa, culantro de castilla, apio, cebolla y pataste, que hoy se comercializan en los diferentes formatos de las tiendas Walmart.
«Hay muchas ventajas de venderle a Walmart: tenemos un mercado seguro, pronto pago y precios justos», afirma este joven ingeniero agrónomo de 32 años, quien cultiva varias parcelas de tierra en la aldea La Labor, Ocotepeque.
Desde muy joven aprendió a trabajar la tierra siguiendo el ejemplo de su padre Luis Alfonso Maldonado Peña (65), su madre María Isabel Deras y su hermano Jorge Alberto Maldonado (37). Hoy, este emprendimiento agrícola es la principal fuente de ingresos para su familia y para decenas de familias beneficiadas en esta laboriosa comunidad del occidente del país.
«La vida de la familia Maldonado Deras es una historia de compromiso, mejora continua, emprendimiento familiar y convivencia comunitaria. Todos ellos, de la mano de Walmart, hemos construido una relación en la que ganamos todos: el que produce, el que distribuye, el que vende y el que compra. Nuestros clientes que son el objetivo final, porque obtienen productos frescos, inocuos, de la máxima calidad y al mejor precio», expresó Vanessa Valladares, subgerente de Asuntos Corporativos de Walmart Honduras.
El producto cultivado en La Labor se envía cada semana al Centro de Distribución de Walmart en San Pedro Sula, desde donde es distribuye a decenas de tiendas de los formatos Walmart, supermercados Paiz, Maxi Despensa y Despensa Familiar.
Luis Alfonso recordó que a mediados de 2016 regresó a su tierra natal después de haber estudiado becado cuatro años en la Universidad Nacional de Agricultura (UNA), donde se graduó como ingeniero agrónomo. Sabiendo que su familia siempre había vivido de las actividades agrícolas por más de 50 años, decidió implementar los conocimientos adquiridos con nuevas técnicas de cultivo y establecer nuevos socios.
Tierra Fértil
Al inicio, la mayor parte de los cultivos se comercializaban en el mercado informal; sin embargo, quedaban expuestos a precios muy por debajo de los costos de operación o incluso a pérdidas totales. Fue entonces cuando decidieron tocar las puertas de Walmart y formar parte del programa Tierra Fértil, el cual brinda asistencia técnica y un mercado seguro a los productores nacionales.
«Desde ahí supimos que la primera ventaja de trabajar con Walmart era tener un mercado seguro, porque desde que sembramos ya sabemos a quién le vamos a vender y el precio al que lo haremos. En el mercado informal es como una lotería: se puede ganar o perder. Hoy, el 80% de nuestra producción la entregamos a Walmart y apenas el 20% restante lo vendemos a otros mercados”, dijo.
Actualmente, este emprendimiento ha llegado a producir hasta 1,200 cajas de productos agrícolas variados en temporadas altas, aunque la producción regular oscila entre 400 y 600 cajas por semana. «Recuerdo que comenzamos con un proyecto de hojas, es decir, culantro y apio, eran alrededor de 50 o máximo 100 cajas que lográbamos colocar «, relata el joven productor.
«Luego decidimos que teníamos que conseguir el código de productor con Walmart y, para 2017, pasamos de 100 a 400 cajas y ahorita mandamos 600 cajas entre zanahoria, remolacha, cebolla. Ha sido tan generoso trabajar de la mano de Walmart que hemos estado en capacidad de enviar dos camiones por semana, con 600 cajas cada uno, es decir, 1,200 cajas por semana», afirma.
Gracias a este repunte en sus ventas y ante la falta de mano de obra en el sector, hace dos años lograron comprar un tractor agrícola (Chapulín) y, hace cinco años, adquirieron otra propiedad para aumentar el volumen de producción.
Junto a su hija Ahylen Johana y su esposa Edenia Johana López, quien también apoya en la contabilidad, Luis Alfonso ve un futuro optimista para su emprendimiento. «Aquí todos trabajamos: mi padre ya no trabaja en el campo por su edad, pero es nuestro supervisor; mi hermano se encarga de algunos productos y yo en otros; mi madre coloca el producto que no entregamos a Walmart», concluye.
Números positivos
Entre 2023 y 2024, la operación de la familia Maldonado Deras experimentó un incremento del 22% en valor de compra y un crecimiento del 16% en volumen entregado. Además, lograron reducir el volumen de rechazo de 19.3% en 2023 a 9.12% en 2024.
Según Luis Alfonso, estos porcentajes positivos son posibles gracias al acompañamiento del programa Tierra Fértil, así como al sistema de medieros que ha implementado con productores de la comunidad, el cual permite repartir ganancias en partes iguales. «Nosotros seleccionamos a las personas y les damos la opción de trabajar con nosotros. Ellos contratan a su vez personal muy calificado y, a la hora de la cosecha, hacemos cuentas y las ganancias se dividen mitad y mitad «, explica.
Como parte de las prácticas sostenibles, Tierra Fértil también les ha capacitado en técnicas de agricultura inteligente, aplicando métodos como: cultivo con curvas a nivel para protección de suelos, rotación de cultivos, uso de abonos orgánicos para evitar la degradación del suelo, aplicación de cal agrícola y control de plagas como la babosa, entre otras.
Actualmente, Luis Alfonso genera empleos permanentes para 10 familias y entre 10 y 15 empleos diarios por obra. De los más de 40 empleos directos e indirectos, alrededor de 10 o 12 son mujeres. Además, benefician a unas 20 mujeres en la maquila de plántulas, donde producen entre 50,000 y 100,000 plantas por mes de remolacha y cebollino.
Luis Alfonso concluye: » hay que apuntar a empresas como Walmart, ya que nos dan facilidades, nos ayudan a avanzar. Con ellos tenemos un 100% de seguridad de que no nos vamos a quedar con el producto en las manos «.


