Numerosos estudios han revelado que el aislamiento y los cambios de la vida social y familiar, han tenido efectos devastadores en la salud mental de las mujeres.
Según el estudio “Babies in Lockdown”, que capturó las experiencias de más de 5,000 familias en el Reino Unido, reveló que siete de cada diez mujeres que dieron a luz durante el aislamiento, manifestaron haber sufrido de depresión post parto.
Cuando se les preguntó, «¿Cuáles son las tres palabras que mejor describen tu estado de ánimo durante los últimos cinco días?», las respuestas comunes fueron: «solitaria», «triste», «ansiosa» y «estresada». De hecho, casi dos tercios de los padres, también compartían preocupaciones importantes sobre su salud mental.
“Los niveles de depresión y ansiedad durante el embarazo y después del parto han aumentado enormemente”, dijo la profesora Amy Brown, cuyo nuevo libro “Covid Babies”, analiza cómo las medidas de salud pandémicas socavaron el embarazo, el parto y la paternidad temprana.
“Algunos estudios sugieren que hasta el 50% o más de las madres embarazadas (especialmente las primerizas) están experimentando altos niveles de síntomas. Por lo general, esperaríamos que esto estuviera entre el 15 y el 20% , peor las cifras se han disparado».
“Lo más importante que podemos hacer es reconocer que tener un bebé en estos tiempos es realmente difícil, y que las madres están justificadas por sentirse olvidadas o ignoradas. Las experiencias de nacimiento, lactancia y cuidado de bebés son cansadas y difíciles, así que debemos reconocer los desafíos y el trauma que han experimentado muchos padres. Fingir que no importa o sugerir que no fue traumático vivir en aislamiento, solo lo hará pero”, afirmó la experta.
«Los padres necesitan la validación de que muchos pasaron un momento realmente angustioso y que está bien sentirse así», finalizó.
Los expertos sugieren buscar ayuda profesional en la medida de lo posible, pues suprimir los sentimientos negativos no ayudará a superar el problema.