Mientras continúa promocionando su próximo álbum, Adele se ha sincerado sobre la difícil relación con su padre, quien luchó contra el alcoholismo, la abandonó cuando era una niña de tres años y se negó a escuchar sus canciones durante años.
En su entrevista con Oprah, la cantando habló sobre el trauma que le causó esta experiencia y cómo él poder reconciliarse con su papá, poco antes de su muerte, trajo alivio a su alma.
El padre de Adele, Mark Evans, murió en mayo a la edad de 57 años después de una larga batalla contra el cáncer de intestino. Evans y su hija se pelearon en 2011 cuando Evans, afirmó en una entrevista que ella luchaba por encontrar el amor debido a sus problemas de abandono.
Según Adele efectivamente la ausencia de su padre moldeó la forma en que manejaba sus relaciones amorosas de adulta, y la habían hecho lastimar a sus parejas como mecanismo de defensa para evitar lastimarse a sí misma.
Evans quien trabajó los últimos años como repartidor de comida, admitió que fue un padre horrible para su hija cuando ella crecía, culpando a su alcoholismo del colapso de su relación con la madre de Adele, Penny Adkins, a quien dejó criando a la niña sin ayuda de nadie.
“En esos años bebía demasiado. Sólo Dios sabe cómo sobreviví”, admitió. Agregó que estaba ‘profundamente avergonzado’ de lo que se había ‘convertido’, y agregó: “Lo más amable que pude hacer por Adele fue asegurarme de que nunca me viera en ese estado”.
«La absoluta falta de presencia y esfuerzo de mi papá, me lastimaron profundamente. Pero finalmente entendí que fue el alcohol, quien quitó a mi papá», dijo entre lágrimas. “Con esto también entendí que yo misma tenía un problema de alcohol que debía dejar”.
Adele confesó que esa última reunión con su padre, le dio el cierre que necesitaba. (Da’ra Magazine) @revistadara
